La división del pensamiento afectivo.

El estaba deprimido. En las navidades le daba un bajonazo de energía pero nunca supo el porqué le sucedía año con año.
Al empezar el nuevo año, decidió dejar todo lo "viejo": desecharlo como el año viejo. Sus amigos ya no lo son, ha llegado a verlos como aguijones que le hieren el alma. Sus páginas se han puesto amarillentas del olvido y han sido abandonadas de cuidados y revisiones.
Qué te ha pasado amigo querido. ¿Todas tus ideas?,… ¡renovadas! su religión?... ¡reciclada!.-- Mira para el horizonte como si nada pasara.¿ Qué se quedó atrás que tuviera mucha importancia? !Pues nada! ¡!Puedo prescindir de todo!. ¡Adonde quiera que mire puedo encontrar lo mismo que dejé atrás! Pero no quiero, no me hace ninguna falta.------ !Miraré solo adelante porque mi Dios me acompaña!.
Y mi amigo del alma sonrió y me ha dicho:

Pocos son mis tesoros, pero no lo sabía!

Y yo pienso......¡eso se llama tener paz!